ROMANCE DEL CONFINADO Desde que empezó el encierro algunos han porfiado para hundir a este gobierno con mentiras a destajo y una estrategia muy clara tal como en el dos mil cuatro, al perder las elecciones tras el horrendo atentado. Primero, sembrar la duda, mostrándose muy indignados, luego, enseguida, acusar de haber sido descuidados, dejando que se juntara la gente el ocho de marzo, mientras aquel que lo dice se fundió en cientos de abrazos, sin que podamos saber a cuantos pasó el contagio de ese simple virus chino, que él, como buen macho hispano, vence sin problema alguno, viviendo para contarlo. Como un martillo pilón son Abascal y Casado, compiten en ver...