El olmo de la imagen, La Olma, era un ejemplar de dicho árbol que, como tantos otros, murió por la enfermedad de la grafiosis. Los que la conocimos y disfrutamos, los que estuvimos albergados bajo su sombra, llegamos a amarlo como a un personaje más de un lugar diminuto, llamado Riocavado de la Sierra.
Entradas populares
-
En todos los años que llevo viviendo en Sobrarbe es la primera vez que acudo a la fiesta de los "Trucos" en el Valle de Chistén ...
-
Escena playera antes de llegar a Calella. Calella es un pueblo que parece tener solera, con magníficos edificios, tanto en la playa como...
-
PLUMA... Soy el leve fulgor, caído, del azaroso cielo de las aves. No tengo voz pero guardo una historia, aunque me veas descolorida y po...
-
Mi llegada a Tossa por el camino interior que atraviesa el bosque de alcornoques y encinas, se hace por una pendiente tremenda que en poco t...
-
Los escalones de la picardía Aparte de aludir, en plural a una prenda femenina, sugerente y ligera, la palabra picardía se aplica con ben...
-
Vuelve septiembre tras un verano aciago de sequedad y fuego de innumerables náufragos sin rostro, de perpetuos gobiernos en funciones q...
-
Siguiendo con la fiesta de los trucos, he de decir que lo de menos es comprender o simplemente entender el por qué de la misma. Simplemente...
-
ROMANCE DEL CONFINADO Desde que empezó el encierro algunos han porfiado para hundir a este gobierno co...
jueves, 16 de julio de 2015
Una vez pasada la playa de San Pol, el siguiente tramo de costa se hace más rocoso y agreste. Hay pequeñas calas rocosas como la del Racó de Garbí, cala del cargolet, cala Maset, la estrechísima cala des Cranc, la más estrecha aún cala del Peix, cala dels Musols, cala de N´Oliu, cala de cap de Mort, cala Ventosa, cala Ametller, cala del Molí, todas ellas de roca, hasta cala Jonca, que vuelve a ser de arena.
Pequeños barquichuelos recalan en las calas rocosas, que con la mar en calma son lugares excepcionales para el baño
Un bello contraste entre el azul del agua y el casi blanco de las rocas en la cala del cap de Mort.
Una roca ideal desde la que darse un buen chapuzón, cerca de cala Ventosa junto a la que pasa el camino de ronda.
Más rincones agrestes, de apariencia salvaje, muy cerca, sin embargo de zonas habitadas.
A la vista del puerto de san Feliu de Guixols
Los últimos acantilados antes de llegar a san Feliu de Guixols
La playa de san Feliu
Playa de San Feliu, de atardecida
Playa de San Feliu de anochecida
En el siglo XI hubo en el Ampurdán cuatro grandes conventos benedictinos, San quirce de Colera, San pere de Roda (el más grande), San Feliu de Guixols y San Miquel de Cruillesta maría de Cerviá y los prioratos de Boada y pantaleu. Los monasterios ayudaron a Joan de Serrallonga en su tránsito por estas tierras.. San feliu es considerado el puerto de Gerona. Los ribatges y mesuratges que se pagaban al abad por los derechos de puerto originaron constantes disputas entre la curia. Cansado de ellas, Pedro el Ceremonioso borró de la lista de pueblos habilitados para descargar trigo al de san feliu.. Esto sería el origen del crecimiento de Palamós. Luego San Feliu acabaría por convertirse en una localidad de realengo. Entre las actividades que se llevaban a cabo en san Feliu estaba la de la recogida de coral. San Feliu es un ejemplo típico de superposición de dos culturas la feudal y la comercial. El comercio de San feliu fue italiano en su mayor parte. Este comercio se tradujo también en una mezcla de sangre italiana. San Feliu fue emporio de la industria del corcho durante mucho tiempo. En los años sesenta al parecer abundaba el turismo inglés.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)