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lunes, 29 de agosto de 2016

C
Cambrils



El término municipal de Cambrils limita con el mar, y con los términos municipales de Montroig (al oeste); Montbrió de Tarragona y Riudoms al norte; Vilaseca y Salou al este. El término municipal de Viñols y Archs (ubicado entre los de Montbrió de Tarragona y Riudoms) penetra en forma triangular en la zona central del de Cambrils, y lo parte prácticamente en dos.
Una curiosidad geográfica, es la existencia de los núcleos urbanos o barrios de Molí d'Avall, Fontcuberta y Sant Joan dels Arcs, que todo y que pertenecen al término municipal del pueblo de Viñols, se hallan encastadros dentro del centro urbano de Cambrils.



Por la mañana, al comenzar a andar por las playas de Cambrils, tan solo las gaviotas ocupan la arena. Las playas se suceden sin interrupción, desde el Cap de Sant Pere hasta la Punta de la Riera de Ruidecanyes.


Playas
Uno de los lugares geográficos más famosos y conocidos de Cambrils son sus playas. El municipio tiene un total de 9 km de playa arenosa, y és donde empieza el golfo de Sant Jordi, algo más allá de la punta de Sant Pere, y se extiende hasta la punta de la riera de Riudecanyes. El puerto intercepta la línea de playas dejándolas a poniente y a levante.

 Estas son:
Playas de levante
Playas del Prat d'en Forés y del Regueral. Longitud: 975 m. Anchura media: 75 m. Grado de ocupación: muy alto. Playa del Cavet. Longitud: 700 m. Anchura media: 30 m. Grado de ocupación: bajo. Playa de l'Esquirol. Longitud: 900 m. Anchura media: 50 m. Grado de ocupación: alto. Playa de Vilafortuny. Longitud: 1.475 m. Anchura media: 60 m. Grado de ocupación: alto. Playa del Cap de Sant Pere. Longitud: 775 m. Anchura media: 40 m. Grado de ocupación: alto.
Playas de poniente
La playa de la desembocadura de La Riera de Alforja. Longitud: 200 m. Anchura media: 25 m. Grado de ocupación: alto. La compañía de animales domésticos (perros) con sus dueños ha sido autorizada por el Ayuntamiento en uno de sus tramos, en septiembre de 2015. Playade l'Horta de Santa Maria. Longitud: 550 m. Anchura media: 50 m. Grado de ocupación: alto. Playa de La Llosa. Longitud: 1.000 m. Anchura media: 55 m. Grado de ocupación: medio. Playa de L'Ardiaca. Longitud: 1.600 m. Anchura media: 50 m. Grado de ocupación: medio
En toda el área que cubre la zona puede encontrarse el pino piñonero, típico de las costas mediterráneas y el más representativo de la zona; está presente en pequeñas agrupaciones en los alrededores, cerca de las rieras y barrancos, así como por el litoral.
Árboles también típicos son los algarrobos que crecen en muchas zonas y que provienen de cultivos cercanos, como también alcornoques, olivos silvestres y otras especies autóctonas.


Cambrils tiene, en la zona de poniente, como ya he visto en lugares anteriores, una serie de playas semicirculares, protegidas por espigones paralelos a la costa, formando arcos más o menos abiertos, que dan una forma típica de concha.
Poniendo en comunicación las diferentes playas, hay un largo tramo cubierto con una plataforma de madera que las comunica y que hace más agradable el paseo.

La villa de Cambrils (33.400 hab en el año 2012), tuvo sus orígenes en un núcleo fortificado ubicado a 1 km de distancia aproximadamente de la costa, cerca del vado del camino real de Barcelona a Valencia (antigua Via Augusta de los romanos), sobre la riera de Alforja. En los últimos siglos, la población se expandió y se concentró en dos núcleos separados por 1 km (la zona marinera del Puerto de Cambrils, a la orilla del mar, y la villa campesina y comercial del interior). Durante el siglo XX, ambos núcleo fueron unidos por el proceso de crecimiento urbanístico.



El impulso turístico que ha recibido la ciudad, comprendida dentro de la Costa Dorada, ha sido lo principal factor que explica la transformación de la morfología urbana así como de su economía (antiguamente agraria y pesquera) del municipio en otra caracterizada por el desarrollo del comercio y de los servicios. La ciudad fue ensanchando también a lo largo de la costa, al este y oeste del núcleo del barrio de la Marina o puerto; así como a partir del núcleo del antiguo castillo de Vilafortuny. Así mismo, la carretera local y costera que unía Cambrils con Salou se convirtió en una columna vertebral por lo que fue expandiéndose a ambos lados la ciudad.



Lugares singulares[editar]

El Faro rojo: ubicado al final del rompeolas del muelle de poniente, del puerto de Cambrils, en contrposición del faro verde, está considerado como uno de los elementos característicos de la ciudad y su espacio portuario. Este, junto con el verde, funciona y sirve como referencia para orientar las embarcaciones durante la noche y está situado en la punta del muelle. Es visita obligada para los amantes de las buenas fotografías y del disfrute de maravillosas puestas de sol, y mirador previlegido de la vida cotidiana de los pescadores.

El Pino redondo: árbol centenario declarado de Interés Local y Comarcal. Ubicado en el paseo marítimo de poniente, en la Av. Diputación, cruce con la Av. Juan XXIII, está considerado como un lugar de referencia por su singularidad y belleza natural.

El muelle de ribera del puerto, conocido popularmente como Mollet del rec. Espacio neurálgico situado delante de la Torre del Puerto, en pleno centro del Puerto de Cambrils. En su tramo central, el muelle desciende hasta el nivel del agua y de la darsena portària en las llamadas "Escaleras Reales". Un espacio donde se realizan tradicionalmente numerosos encuentros, actos y eventos sociales y festivos. En el año 2011 se inauguró la escultura del reconocido artista cambrilense David Callau Gené que lleva por título "En el pla de les Serenes". Conjunto escultórico realizado en acero cortén, cerámica y acero inoxidable, conmemorativo en recuerdo del centenario del Año de las Desgrácias (1911-2011) en el que muchos pescadores del litoral catalán, varios de ellos de Cambrils, fallecieron. Dicho conjunto escultórico formado por tres pescadores que representas las almas. En sus manos llevan dos cestas de pescado para vender, como se hacía antiguamente. Las dominan 2 sirenas de alturas majestuosas que simbolizan la bonanza y la tempestad, La Dulce y la Calma de este mar. Seres mitológicos metáforas también de los elementos: El sol y la luna, determinantes a la hora de salir a pescar. Observándolo todo, el pequeño Adrián es el símbolo del presente y del futuro, la nota de color y ternura. Infancia e inocéncia que observa la escena desde un plano de serenidad.





A partir de la Riera de Riudecanyes hay un zona de piedras, en la que no hay cerca urbanizaciones. Un largo tramo de playas estrechas y pedregosas, en las que apenas se ve algún pescador, pero no bañistas.
Se recorre un paraje conocido como la partida Poblas, ocupado por la playa de la Pixerota  y la de Motroig, hasta llegar a la Punta de la Pixerota. Más tarde se recorre la playa de la Rifá, la dels Pilans hasta la Punta de la Porquerola. Desde la punta de La Pixerota ya hay urbanizaciones y campings.
En las siguientes playas arenosas me encuentro estos troncos de árboles anclados allí, no sé si por la mano del hombre (que seguro es quien los ha talado) o por la acción de las olas que los ha dejado allí.
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Un paraje especial. Unos enormes pinos. El tronco muerto de uno de ellos yace entero en horizontal
Junto a esos pinos, una bella construcción de toque oriental y chumberas, en la zona de la playa de la Pixerota.

Más allá de la Punta de la Porquerola están la Ribera,  la playa de la casa des Lladres, la playa de l´Estany Salat, la playa des Penyals, en las que ya se ven bañistas cada vez más numerosos y urbanizaciones de cierta envergadura.
Antes de la Punta des Penyals, hay una pequeña cala, la dels Vienesos, más tarde la cala de las Sirenas, la cala del Solitari, cala Misteri, cala Santa Fe, cala California, cala Bot, cala del pescador y cala dels Angels. Estas últimas dan paso a una playa larga, llamada la playa de Cristal. Tras cala Figuera, que forma parte de la anterior, se llega a la Punta del Riu, al lado mismo del puerto de l´Hospitalet de l´Infant.





Tras el puerto de l´Hospitalet de l Infant, comienza una playa que se llama del Arenal, que forma un gran arco abierto. Allí las aguas son muy calmas. Es una playa muy llana.

Hospitalet del Infante1 (oficialmente y en catalán L'Hospitalet de l'Infant) es un núcleo de población perteneciente al municipio de Vandellós y Hospitalet del Infante, situado en la Provincia de Tarragona, comunidad autónoma de Cataluña, España.



Es el principal núcleo urbano del municipio de Vandellòs y l'Hospitalet de l'Infant (Baix Camp), situado en la costa, a la derecha de la desembocadura del río de Llastre, que se le hace también de límite con el término de Mont-roig del Camp y el núcleo urbano de Miami Playa. Su población es de 4.510 h [año 2009]



El centro del núcleo de la población se encuentra encima de un promontorio rocoso, flanqueado por extensas playas y atravesado por el río Llastres.









Historia



En la parte alta del promontorio se encuentran los restos del hospital construido a mediados del siglo XIV, por deseo del infante Pedro de Aragón y de Anjou, hijo de Jaime II de Aragón y que da nombre a esta localidad. El Hospital del Coll de Balaguer se construyó para ofrecer alojamiento a religiosos, viajeros y mendigos que transitaban, por la ruta entre Barcelona y Valencia, por la ruta de la antigua Vía Augusta romana. Son evidencias de la época romana también el nombre del río Llastres, en catalán ullastre, del latín oleaster y las referencias de Avieno como Oleum flumen en la Ora maritima, así como los restos arqueológicos de la época romana encontrados en el municipio.



Iglesia

Las razones de la fundación del antiguo hospital gótico, por parte de Pedro IV de Ribagorza, desde el año 1341 señor del condado de Prades y de la baronía de Entenza, obedecen al deseo de establecer las bases para la repoblación y resurgimiento económico de la zona, y mediante esta construcción fortificada asegurar el control de una costa expuesta entonces a los frecuentes ataques corsarios. El edificio fundado en el año 1344 era una estructura de planta cuadrada de unos 55 metros de ancho, con un patio central, flanqueada por seis torres, cuatro en los ángulos y dos en el centro de los lados norte y sur. El recinto es un excelente ejemplo del gótico civil catalán, con grandes naves culminadas con arcos diafragma sobre los que descansaban las vigas de madera y solamente se podía acceder por la puerta existente en la torre meridional. La construcción, que tuvo la función de acoger a viajeros desde principios del siglo XIX, se vio involucrada por ser una fortifiación en la guerra civil catalana del siglo XVI, en la Guerra de los Segadores, batalla del Coll de Balaguer, 1640, fue objeto de ataques corsarios y gravemente afectada durante la Guerra de la Independencia Española, hechos que implicaron su deterioro.



Actualmente, el hospital se ha consolidado y mantiene sus cuatro torres levantadas, la entrada a la plaza del pozo, tres fachadas y tres arcos góticos detrás de los patios de las casas que hay en el interior.

La localidad creció notablemente en los últimos años, como consecuencia del incremento de la actividad económica, especialmente el turismo, que se ha convertido en la principal fuente de ingresos del municipio. Se han construido diversos equipamientos como hoteles y urbanizaciones, y un puerto deportivo que dispone de 575 amarres.



La otra gran fuente dinamizadora fue la construcción de la central nuclear de Vandellós en 1972. Tras el cierre del Grupo I, continúa en funcionamiento el Grupo II, situado en la costa a pocos kilómetros del núcleo de población.

En l´Hospitalet de l´Infant conocí a Juan "Boina". De esta manera se presentaba a sí mismo. Cuando llegué, pasado el mediodía fui a buscar alojamiento al albergue municipal. Estaba completamente ocupado y me vi en la obligación de buscar alojamiento en la ciudad. Tuve la suerte de encontrarme a Juan, quien, visto que era difícil que encontrase un lugar en el que hospedarme, me ofreció su casa y me dio su confianza. Me dijo que haciendo honor al nombre de l´Hospitalet , no podía hacer menos que ofrecerme su hospitalidad, cosa que hizo. Conservo su amistad y aunque no nos hemos visto desde ese verano de 2013, nos llamamos de vez en cuando. No solo me ofreció su casa sino que me invitó a cenar y pasamos una alegre velada musical en una terraza al aire libre del centro, en la compañía de sus dos preciosas hijas. Ha sido el encuentro más entrañable del que guardo recuerdo y algo que me reconcilia con el país que yo conocí cuando era pequeño, cuando a los viajeros, vagabundos o extraños que llegaban por primera vez a un lugar se les acogía con respeto y sin la desconfianza que, cada vez más, nos caracterizan. Antes de partir me regalo un libro sobre la historia de l´Hospitalet en comic. Yo, por mi parte, le regalé un libro de haikús japoneses. Espero poder corresponder algún día a su hospitalidad. Con él hablé sobre Gervasio Sánchez, periodista al que ambos admiramos y que vivió parte de su infancia en l´Hospitalet. Un encuentro inolvidable en suma.